La paraguaya Montserrat Viveros brilla con oro en Lima
Montserrat Viveros, celebra en lo más alto del podio. FOTO: Gentileza
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Tras la celebración de la tercera jornada del Campeonato Sudamericano de Esgrima pre-cadetes, cadetes y juveniles Lima 2019, Paraguay sumó su segunda medalla, en esta ocasión la de oro a través de la espadista Montserrat Viveros, quién por segundo año consecutivo subió a lo más alto del podio en la categoría juveniles (hasta 20 años).
La magnífica consagración de la destacada atleta paraguaya se dio luego de vencer en la gran final a la espadista argentina Datev Nahapetyan con un contundente score de 15 a 6. Esta prueba contó con un total de 24 tiradoras, entre ellas también estuvieron nuestras compatriotas Andrea Viveros y Anahí Cacace, quienes ocuparon la 13ª y 20ª posiciones respectivamente.
Montserrat Viveros disfruta de su medalla de oro con su entrenador Juan Antonio Lucas. FOTO: Gentileza
En la modalidad de espada masculina juveniles también compitieron varios atletas de nuestro país, entre ellos Nicolás Leguizamón se posicionó en el 22° lugar; Hugo Cacace, en el 25°; Juan Graziani, en el 28° y Francisco Acosta, en el 32°.
En cuanto al sable masculino, Matías Martínez quedó en 19° lugar y Juan Pablo Pérez en el 27°. En damas, Fernanda Martínez quedó en 13ª ubicación en sable femenino de entre 28 tiradoras. La siguiente justa se dará en la modalidad por equipos en la categoría juvenil.
La primera presea del medallero nacional se dio en la jornada previa con la magnífica presentación del atleta Manuel Bernal, quien se colgó la medalla de bronce en la modalidad espada masculina pre-cadete, hasta 15 años.
La comitiva paraguaya la integran los atletas Janine Hanspach, Montserrat Viveros, Hugo Cacace, Andrea Viveros, Anahí Cacace, Nicolás Leguizamón, Manuel Bernal, Juan Graciani, Bruno Galeano, Juan Pablo Pérez, Amara Martínez, Luciana García, Francisco Acosta y Matías Martínez.
Acompañan a la misma el entrenador Juan Antonio Lucas y el presidente de la Federación Paraguaya de Esgrima, Miguel Paredes.
El país se paraliza hoy con un superclásico que marcará la tendencia del desarrollo de la recta final del torneo Apertura.
A Olimpia, la victoria lo encaminará definitivamente a su tercer título consecutivo, ya que sacará siete puntos de ventaja y todavía con un partido menos.
Mientras que a Cerro Porteño, el triunfo lo mantendrá con vida en el campeonato y ganas de seguir peleando hasta el final. La igualdad dejará las cosas como vienen y será más festejada por el equipo de Para Uno que por el de Barrio Obrero.
Y como se juegan todo, ninguno se guarda nada. Pese a tener dentro de tres días un partido clave por Copa Libertadores, en el que debe asegurar su clasificación a los octavos de final, Daniel Garnero pondrá su mejor equipo para enfrentar al rival de siempre, que en una situación similar en el Apertura del año pasado lo derrotó y le impidió alcanzar el título de manera invicta. La única duda es si el Sub 19, Hugo Quintana, arrancará por Rodrigo Rojas o por William Mendieta.
Por su parte, Jubero sufrió la sensible baja de Víctor Cáceres en la semana, pero aun así recurre a su mejor equipo para buscar acortar distancias tras el tropezón a mitad de semana ante Capiatá. La sorpresa entre los concentrados es Fernando Ovelar, quien podría tener la oportunidad de arrancar el juego como Sub 19, aunque el que parte con ventaja para ocupar ese puesto es Alan Rodríguez.
Guaraní, muy venido a menos local e internacionalmente, jugará ante San Lorenzo, otro que anda con la capa caída, y que empieza a mirar peligrosamente la zona del descenso.
Los aurinegros fueron a jugar por la Copa Conmebol Sudamericana ante Deportivo Cali en Colombia, no mostraron mucho y terminaron perdiendo 1 a 0, y con tres jugadores expulsados.
Es una prueba de fuego para los aurinegros. La continuidad de Gustavo Florentín es cada vez más complicada, tiene el respaldo del presidente, Juan Alberto Acosta, pero le dan la espalda los otros directivos.
Una victoria tranquilizará las cosas, pero una derrota sería como una bomba de tiempo.
En San Lorenzo los naipes no están bien barajados. Las derrotas seguidas empiezan a tener efecto y Sergio Orteman de héroe podría pasar a villano. Para ellos es fundamental salir de los malos resultados.
