Fue el batacazo de la fecha. General Díaz -que no venía bien- dio el golpe y derrotó por 1-0 a Libertad, gracias al gol convertido por Diego Doldán, luego de que un saque del arquero Martín Silva, pegara en él.
Sin embargo, la situación más comentada del partido, llegó sobre los 22 minutos, un remate del juvenil Iván Franco impactó dentro del área y en la mano del defensor David Mendoza. El primer cobro fue un tiro libre, pero luego llegó la sanción de la pena máxima.
Arnaldo Samaniego, árbitro del juego, recurrió a sus asistentes y tras casi cinco minutos de polémica y confusión, terminó cobrando el tiro libre directo desde los doce pasos. En la fecha, el réfere aclaró cómo se dio este asunto.
"El tema de la demora fue porque quería estar seguro de lo que estaban diciendo. La fiebre del VAR está metiéndose de a poquito en nuestro fútbol; luego de hablar y hablar, ellos totalmente seguros de lo que me dijeron, decidí y gracias a Dios hicimos justicia. Ahora no me puedo apoyar en las imágenes, el año que viene sí", contó Samaniego a la radioemisora 650 AM.
Falla en el intercomunicador
Mientras que el cuarto juez de ese encuentro, Sergio Melgarejo, indicó que tuvieron fallas con el intercomunicador. "Lo que pasa es que el intercomunicador no estaba funcionando bien. No tenía mi auricular y estaba usando en forma manual, luego escucho que los compañeros estaban conversando de que fue mano. Ahí uno la información", señaló Sergio.
"Teníamos que estar 1000 o 2000% seguros de lo que vimos para decidir, acá nosotros hicimos trabajo en equipo. Hicimos justicia deportiva tal como lo pide la FIFA; lo que pasa es que los muchachos vieron una mano pero no estaban seguros si era derecha o izquierda, faltar a la verdad, eso no voy a permitir. Se hizo trabajo en equipo", añadió Melgarejo.
"Negamos categóricamente que tuvimos apoyo de afuera", redondeó en última instancia el árbitro.
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