El internacional suizo Yann Sommer es el nuevo guardameta del Inter de Milán, que busca un número uno de experiencia tras la marcha del camerunés Andre Onana al Manchester United.
"Experiencia, liderazgo y entrega, esas son las cualidades que Sommer pondrá en beneficio de la camiseta 'nerazzurra'", indica el comunicado del Inter, para oficializar la llegada del jugador.
La duración de su contrato con el club lombardo, vencedor de la Copa de Italia de 2023, no fue precisada. El monto del traspaso está estimado en seis millones de euros (6,6 millones de dólares).
Sommer, de 34 años, había llegado al Bayern Múnich en enero pasado para sustituir a Manuel Neuer, gravemente lesionado en la rodilla derecha, cuando esquiaba a principios de diciembre.
El guardameta suizo tenía un contrato que expiraba en 2025 con el Bayern, pero Neuer, que no ha participado todavía en los partidos de preparación del campeón de Alemania, recuperará su plaza de titular.
"Nunca olvidaré mi experiencia en este gran club", afirmó Sommer en su Instagram, en un mensaje de despedida a los aficionados muniqueses.
Sommer (83 partidos internacionales con Suiza), pasó por el FC Basilea y el Grasshopper de Zúrich, ambos de Suiza, y el Vaduz, de Liechtenstein, antes de hacer lo esencial de su carrera en el Borussia Mönchengladbach alemán (2014-23).
Roma, Italia | AFP.
Fue uno de los dolores de cabeza que tuvo Guaraní en el partido de ida en Río de Janeiro por los octavos de final de la Copa Sudamericana, pero no estará en el juego de vuelta en Asunción de este miércoles.
Se trata de Tiquinho Soares, el delantero del Botafogo que ingresó en el segundo tiempo y marcó el gol del triunfo en Río de Janeiro a través de los doce pasos, quien se lesionó en el partido de este fin de semana ante Cruzeiro tuvo que dejar el campo de juego en la adición del primer tiempo.
Mientras que este lunes, el Botafogo anunció a través de sus redes sociales: "El atleta Tiquinho Soares fue sometido a un examen de imagen y se constató una lesión en el ligamento colateral medial de la rodilla izquierda. No hay necesidad de cirugía, pero el plazo de recuperación será en torno a las cinco semanas".
El partido de vuelta entre Guaraní y Botafogo se juega este miércoles desde las 18:00 en el Defensores del Chaco. Tras la derrota 2-1 en la ida, el Aborigen está obligado a ganar por dos goles de diferencia para conseguir una clasificación directa; un triunfo por un gol de diferencia estira la definición a los penales y cualquier otro resultado, clasifica a los brasileños.
El lateral izquierdo Gabriel Báez fue uno de los apartados en Cerro Porteño luego de la salida de Facundo Sava como DT "azulgrana".
Ahora en Nacional de Uruguay, el argentino nacionalizado paraguayo disputó el compromiso por los octavos de final de la Copa Libertadores ante Boca Juniors como titular y lo hizo de buena manera, completando todo el encuentro.
Báez contó todo lo que pasó y sintió en el momento de haber abandonado el "Ciclón" de Barrio Obrero en una entrevista para el programa "Punto Penal" del Canal 10 de Uruguay.
"Mi final en el club (Cerro Porteño) fue complicado, arrancamos el año muy bien, pero en la fase de grupos tuve una que me echaron a los 15 minutos contra Palmeiras. Eso afectó muy duramente a mi y a mi familia, me decían cosas en la calle y me silbaban en la cancha, con eso el jugador pierde confianza y no es el mismo, yo venía con la confianza muy alta y la fui perdiendo hasta que en la última fecha que jugué (ante Guaireña), perdimos 3 a 1 y me llegó una llamada", arrancó comentando Báez.
"Nunca me dijeron el motivo por el cual me dejaban de lado, ni a ninguno de mis compañeros que dejaron afuera, pero bueno, asi fue. Cuando llegó esa llamada de Cerro Porteño, para mi fue muy chocante, estuve muy mal, recién me había mudado hace 2 meses, mi nena en la escuela, mi señora ahí conmigo... Que te llamen y no te digan un motivo, imaginate como yo estaba", aseguró el lateral del "Bolso".
El lateral también comentó que los demás jugadores en el plantel "azulgrana" lo llamaron para levantarle el ánimo en un momento muy complicado para el y aseguró que con Facundo Sava tenía la confianza necesaria para rendir en la cancha.
"En Cerro Porteño, de 32 partidos, jugué 29. Jugué mucho, porque lo tuve al profe Sava y me daba mucha confianza", mencionó.
