El delantero griego Giorgos Giakoumakis, del Atlanta United, fue reconocido este jueves con el galardón a la 'Mejor Contratación del Año' de la liga norteamericana (MLS), del que también era finalista Lionel Messi.
El astro argentino provocó un terremoto en Estados Unidos con su llegada en julio a Miami y fue capaz de impulsar al equipo hasta el primer título de su historia en la Leagues Cup, el torneo conjunto con la liga mexicana.
En la temporada regular de la MLS, sin embargo, el capitán albiceleste apenas disputó seis partidos, cuatro como titular, con dos goles y una asistencia.
Messi, que el lunes recogió en París su octavo Balón de Oro, sufrió problemas físicos que impidieron que el Inter peleara por la clasificación a los playoffs.
Giakoumakis, de su lado, firmó 17 dianas y 3 asistencias en los 27 partidos que jugó en su primera campaña en Atlanta, equipo que está disputando la primera ronda de las eliminatorias.
El griego, por cuyos servicios el United abonó unos cinco millones de dólares al Celtic escocés, recibió un promedio de 45,78% de los votos generales, que se dividían por jugadores (34,34%), clubes (46,34%) y medios de comunicación (56,65%).
Messi, que llegó libre a Miami desde el Paris Saint-Germain, obtuvo el 35,54% de los votos de los jugadores, el 34,15% de los equipos y el 12,14% de los periodistas, para un promedio de 27,28%.
El tercer finalista era el alemán Eduard Löwen, del St. Louis City, que recibió el 15,44% de los votos.
AFP.
En un desenlace increíble, el líder del Brasileirão, Botafogo, terminó perdiendo por 4-3 ante el Palmeiras un partido que iba ganando por 3-0 al final del primer tiempo.
En medio de la remontada histórica del Palmeiras, convirtiendo los 4 goles en el segundo tiempo y el de la victoria en el minuto 9 de adición, Botafogo tuvo un expulsado (Adryelson) y un penal errado (por Tiquinho Soares).
Ante todo esto, el dueño del Botafogo, donde Gatito Fernández y Matías Segovia estuvieron en el banco de suplentes, estalló al final del partido, asegurando que se trató de un "robo" y "corrupción", pidió renuncia del presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol y hasta incluso le habló a los jugadores del Palmeiras mientras estos se retiraban de la cancha.
John Textor, quien también es dueño del Crystal Palace de la Premier League y del Olympique de Lyon, habló a un costado de la cancha con SporTV y dijo: "El mundo entero lo vio, eso no era tarjeta roja, ni siquiera estoy seguro de que haya sido falta, eso no es tarjeta roja", comenzó criticando primero la expulsión de Adryelson.
Y luego vino lo peor: "Esto cambió el partido, esto es corrupción, es un robo. Por favor, múltame Ednaldo (Rodrigues, presidente de la CBF), pero tenés que renunciar mañana a primera hora. Eso es lo que tiene que ocurrir. Este campeonato se ha convertido en un chiste", descargó.
"Nadie se merece esto. Estos jugadores (apuntando a los futbolistas del Palmeiras que estaban dejando el campo de juego) no merecen ganar de esta manera, nosotros no merecemos perder de esta manera, son cinco partidos seguidos...", agregó y luego se dirigió a los futbolistas del "Verdão": "Señores, jugaron un buen partido, no es su culpa, pero esto es una p... corrupción".
Y finalizó: "Este tiene que cambiar. Y, Ednaldo, tenés que renunciar por el bien del juego. Tiene que terminar ahora mismo. Esto es un robo. Múltenme, expúlsenme si quieren, pero este es mi estadio, voy a seguir estando aquí".
El Real Madrid anunció este jueves la renovación del joven extremo brasileño Rodrygo Goes por cinco temporadas hasta 2028, al que habría blindado con una cláusula multimillonaria.
"El Real Madrid C. F. y Rodrygo han acordado la ampliación del contrato del jugador, que queda vinculado al club hasta el 30 de junio de 2028", afirmó el Real Madrid en un comunicado.
El equipo merengue no precisa cifras, pero, según la prensa local, la renovación vendría acompañada de una cláusula de rescisión de 1.000 millones de euros (1.062 millones de dólares).
El anuncio de la renovación de Rodrygo, que tenía contrato hasta 2025, se produce apenas 48 horas después de la de su compañero y compatriota Vinicius, que firmó hasta 2027 con el conjunto merengue.
Llegado en el verano de 2019 procedente del Santos por 45 millones de euros (47,8 millones de dólares), el joven extremo brasileño dio pronto muestras de su potencial.
AFP.
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