La final de la Copa Libertadores, entre Fluminense de Brasil y Boca Juniors de Argentina, es la atracción total en el continente y el mundo entero.

El Maracaná ya está en ambiente de final copera, con presencia de importantes personalidades del mundo del deporte. Así también se encuentran leyendas del fútbol paraguayos, quienes disfrutan del gran encuentro continental en Brasil.

Se lo pudo ver a Carlos Humberto Paredes, quien publicó en su cuenta de Instagram varias imágenes del imponente Maracaná con otras caras conocidas, como Carlos Gamarra, Nelson Haedo Valdez, Roberto Acuña, Paulo Da Silva, Jonathan Santana, entre otros.

Además, gran parte del plantel de Olimpia campeón de la Libertadores del 2002, marcó presencia. Sergio Orteman, Pedro "Ganso" Benítez, Mauro Caballero, Gastón Córdoba, Ricardo Tavarelli, Felipe Giménez.

Lo mismo que el presidente actual de Olimpia, Miguel Cardona, se mostró posando con los campeones del 2002.

Río de Janeiro, Brasil | AFP

Boca Juniors tiene todo nuestro respeto por su tradición y por lo que ha hecho en esta Copa Libertadores, aseguró este viernes el técnico de Fluminense, Fernando Diniz, en la antesala de la final de la edición 2023 en el legendario Maracaná.

"Mañana se verán dos equipos que han conquistado el mérito de estar en la final. Boca tiene todo nuestro respeto por su tradición, por su trabajo en este torneo hasta llegar a la final", dijo Diniz en rueda de prensa.

"Llegaron a la final porque tienen un gran equipo, un gran técnico. Hemos visto muchos partidos de Boca, un equipo con ideas claras y que sabe jugar muy bien", agregó el también seleccionador interino de Brasil.

Diniz evitó referirse a un jugador en particular de Boca, pero advirtió que su equipo está preparado para cualquier situación que se pueda presentar en el partido, previsto el sábado a las 17H00 locales (20H00 GMT).

- "Entrenamos hasta penales" -

"Hemos entrenado todo, hasta penales. Sabemos que tienen un muy buen plantel, bien entrenado, así que nos preparamos para todo lo que pueda pasar en cualquier escenario durante el partido", remarcó.

El entrenador del Tricolor carioca también llamó a vivir el partido "en cordialidad y armonía" y alentó a ambas hinchadas a respetarse de acuerdo con el resultado.

"La hinchada perdedora debe respetar al ganador, hay uno que va a ganar, y el otro debe respetar. Nuestra hinchada espera con mucha ansiedad este título y haremos todo en la cancha para tener ese resultado", destacó.

El Fluzão, uno de los clubes grandes de Rio de Janeiro y de Brasil, nunca ha levantado el trofeo de la Libertadores. Lo más cerca que estuvo el Tricolor carioca del barrio de Laranjeiras fue en 2008, en su primera presencia en una final, cuando perdió en el Maracaná en definición por penales con Liga de Quito.

Diniz consideró que disputar la final en el Maracaná "es un factor que ayuda pero no es determinante".

"Nos vamos a enfrentar a un equipo que sabe jugar muy bien de visitante, así como nosotros hemos tenido buenos resultados jugando fuera del Maracaná. Estamos centrados en el partido y nos vamos a entregar y a tener mucha inspiración mañana en el juego", puntualizó.

El defensor central y capitán del Fluzão, Nino, recuperado de un esguince de rodilla que lo alejó varias semanas de la formación, destacó la fortaleza mental del equipo y de sus principales referentes para encarar la final.

"El equipo llega muy bien preparado a la final. Tenemos jugadores que están acostumbrados a jugar grandes partidos y desde hace mucho tiempo pensamos en esta fecha (...) hemos llegado a la final con mucho merecimiento", aseguró.

Río de Janeiro, Brasil | AFP

Boca llega en su mejor momento a la final de la Copa Libertadores-2023, aseguró este viernes el técnico del Xeneize, Jorge Almirón, en la antesala del partido por el título en el Maracaná ante Fluminense, un equipo con "un ADN de jugar siempre bien".

"Hemos venido jugando este partido desde hace mucho tiempo. Preparándolo, conversándolo, imaginándolo. Vamos a jugar contra un gran equipo que no cambiará su forma de jugar por estar en la final", dijo Almirón en rueda de prensa.

"Imagino un partido donde los dos lo van a intentar jugar a su manera, muy cerrado. Pero de lo que sí estoy seguro es que este equipo está a la altura para jugar una final, sabiendo todo lo que representa para Boca", agregó.

El Xeneize disputará su duodécima final de Libertadores y persigue con desespero el séptimo título tras los ganados en 1977, 1978, 2000, 2001, 2003 y 2007, tres de ellos (2000-2001-2007) gracias al exquisito talento de Juan Román Riquelme, máximo ídolo del club azul y oro del barrio bonaerense de La Boca, y del que hoy es su vicepresidente.

De conquistar la séptima, Boca igualará con Independiente de Avellaneda como el máximo ganador del principal torneo de clubes de la Conmebol.

"Me siento muy orgulloso por la ilusión que hemos generado en la gente. La mayor movilización de hinchas de Boca en la historia. Es un gran responsabilidad y somos conscientes de lo que está en juego, de lo que desea el hincha de Boca", apuntó.

Almirón, que arribó a Boca a mediados de abril, destacó el momento del equipo, con jugadores consolidados y la proyección de nuevos valores surgidos en la cantera, y la idea de juego consolidada.

"Es emblemático el partido de mañana para todos, en un estadio como este con tanta historia. Recién vimos que las butacas están pintadas de azul y amarillo, qué más para regalarle una gran alegría al hincha de Boca", remarcó con una amplia sonrisa.