Sin pelos en la lengua, José Luis Chilavert respondió a un comentario vertido por el exembajador del Reino Unido en Paraguay, Matthew Hedges.
El diplomático se hizo eco de los comentarios de la prensa brasileña, sobre el último arrebato del excapitán de la Albirroja, quien explotó contra el delantero Vinicius Jr. tras echarse a llorar por los ataques racistas que sufre en el fútbol español.
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En este sentido, Hedges recordó que Chilavert encabezó una “fallida campaña homófoba” para expulsarlo del Paraguay durante su estadía como representante británico, allá por el 2018. “Fue una sorpresa esta mañana descubrir que la honesta emoción pública de Vinicius Jr por el abuso racista había llevado a una mención en el periódico brasileño @jornalodia, de la fallida (ups) campaña homofóbica para expulsarme de Paraguay. Peculiar. Gracias mi cielo @JoseLChilavert”, escribió.
Ni lento ni perezoso, Chila salió al paso y apuntó directamente contra la sexualidad del referido. “Sr Matthew Hedges por suerte lo sacaron de mi país. Usted sabe que en Paraguay los pepinos los comemos como ensalada. No sé como lo come usted. Saludos”, disparó.
Este cruce de declaraciones no pasó desapercibido en las redes, que reaccionaron con todo tipo de opiniones e insultos, para ambos protagonistas.
Dani Alves y Robinho, condenados por delitos sexuales, abrieron un fuerte debate dentro del fútbol brasileño. Sin embargo, el siempre polémico Felipe Melo, integrante del Fluminense campeón de la Copa Libertadores 2023, se salió del hermetismo reinante sobre el tema y dio su opinión.
El jugador se presentó al programa Abre Aspas de Globo Esporte e hizo pública su postura. “Mira, en primer lugar, nadie está obligado a hablar de esto. ‘Ah, pero ¿por qué no lo hace fulanito?’. No habla porque no está obligado, pero yo no veo ningún problema”, arrancó.
Melo indicó que tiene una hija de 15 años y, si ella hubiese sido la víctima, otra sería la historia. “Si lo hubiera hecho con mi hija, no creo que estaría aquí para concederle esta entrevista. Creo que hay que respetar a los seres humanos, a las mujeres y a los hombres”, señaló el tres veces ganador del máximo título continental.
El temperamental jugador de 40 años contó que se crió -básicamente- “en la selección brasileña junto a Daniel Alves” y, a lo largo de su carrera internacional, disputó la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010 junto al mítico lateral derecho del FC Barcelona, además de compartir ese mismo plantel con Robinho.
A la hora de ofrecer su opinión sobre los procesos penales que atraviesan sus ex compañeros en la Verdeamarela, fue claro. “Las noticias son una bomba, tienen que pagar por lo que hicieron. Si son condenados, tendrán que pagar por lo que han hecho. Y que sirva de lección para que otros no lo hagan. Esto es muy serio, no hay que escapar al bulto. Tienen que pagar, y una vez que hayan pagado su condena y salgan, tienen que ser resocializados”, argumentó.
Explicó que las chances de un regreso al deporte de máximo rendimiento son muy pocas: “Yo creo que ya no podrán jugar al fútbol. Tampoco pueden cerrarles las puertas, porque han pagado. Por la ley de los hombres, han pagado. Tienen que pagar. Ni siquiera creo que sea el tiempo suficiente. Daniel Alves ya está fuera de la cárcel. No creo que sea suficiente para alguien que le hizo esto a una mujer. Imagina los sentimientos de la chica, que es su hija, sus padres. Una vez que el tipo es condenado, se acabó”, zanjó.
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Ángel Ortíz entró de lleno al choque de generaciones y lanzó una observación puntual para los futbolistas de hoy día.
Al excentrocampista le cae pesada la nueva onda de los jugadores, quienes hacen gala de porte “llamativo” y otras cuestiones, a diferencia de los de años atrás.
"Yo me preocupaba por jugar, estar en el equipo. No por los tatuajes", señaló en charla con radio Primero de Marzo.
Con una notable trayectoria (Libertad, Olimpia, 12 de Octubre de Itauguá, Sportivo Luqueño, entre otros) a sus espaldas, el aregueño entiende que “la forma de jugar luego cambió”, pero ello tampoco maquilla la evidente erosión de la cultura de vestuario.
"Antes hablábamos de fútbol, hoy cada uno está con su auricular", zanjó por ese lado.
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Recientemente, el exalbirrojo fue designado como entrenador del Club 8 de Septiembre de Valle Pucú, con las miras puestas en la Liga Regional Aregueña de Fútbol.
Sobre el estilo de juego actual, Ortíz alegó que la entrega ya no es la misma y hace falta volver a la vieja escuela. "Yo me gané el cariño de la gente jugando”, sentenció.
