Libertad no aguantó sobre el final ante River Plate, cayó 2-1 y complica enormemente sus chances hacia los octavos de final de la Copa Libertadores. El Millonario ganó sus tres partidos, está virtualmente clasificado a la siguiente fase y el Gumarelo quedó por debajo de Nacional (de Uruguay), que también cumplió en casa en esta tercera fecha del Grupo H.

El repollero sufrió bastante en grandes pasajes del primer tiempo, principalmente por los costados una vez más, ya que el equipo visitante se impuso con los jugadores por fuera con Pablo Solari como el más activo a espaldas de Néstor Giménez.

El equipo de Ariel Galeano quiso jugar por momentos de igual a igual, pero le costó muchísimo defender en retroceso y River genero muchas ocasiones, uno de ellos anulado por off side del colombiano Miguel Borja.

Al cuadro paraguayo se agrandaron los problemas de entrada, ya que muy tempraneramente se tuvo que ir lesionado Lorenzo Melgarejo y el DT liberteño tuvo que improvisar a Matías Espinoza como extremo.

Luego un acoso permanente, el equipo argentino se puso en ventaja a los 34 minutos gracias a Pablo Solari, quien pescó una mala salida de la defensa guaraní y tras perfecta habilitación de Aliendro, se tiró al piso cambiar la trayectoria del balón ante la salía desesperada del arquero Morínigo.

Libertad reaccionó con algo más de juego y mucho empuje. Dentro de todo le vino bien la frescura de Matías Espinoza, quien justamente firmó el 1-1, de cabeza y tras un córner ejecutado por Lucas Sanabria.

En el segundo tiempo, el equipo paraguayo se mostró mejor en posesión y ambición, pero le costo generar ocasiones para desequilibrar el marcador a favor. River se quedó mucho más y por momentos cedió el balón, pero los cambios albinegros no funcionaron, principalmente los ofensivos, como el caso de Aguilar y Elvio Vera, quien había sustituido a un flojísimo Iván Franco.

Por su parte, el cuadro millonario, sí tuvo respuestas en las variantes que introdujo Demichelis. Con Franco Mastantuono controló mejor el medio junto a Lanzini, pero le costaba profundizar y dañar en territorio rival, ya que Borja protagonizó un partido bastante discreto.

Pero la calidad de los jugadores terminaron marcando la diferencia sobre el final. A falta de diez minutos, tras una brillante jugada colectiva a un toque, el joven Franco Mastantuono, de apenas 16 años, anotó un gran gol, que tuvo algo de colaboración de Iván Ramírez, quien sin querer, terminó punteando hacia el arco de Rodrigo Morínigo.

Libertad

1

• 
  Rodrigo Morinigo
• 
  Iván Ramírez
• 
  Luis Cardozo
• 
  Diego Viera
• 
  Néstor Giménez
• 
  Lucas Sanabria
• 
  Hugo Martínez
  72'
• 
  Hernesto Caballero
• 
  Álvaro Campuzano
  57'
• 
  Bautista Merlini
• 
  Iván Franco
• 
  Elvio Vera
  72'
• 
  Óscar Cardozo
• 
  Gustavo Aguilar
  57'
• 
  Lorenzo Melgarejo
• 
  Matías Espinoza
  22'
• Entrenador
• Ariel Galeano

River Plate

2

• 
  Franco Armani
• 
  Andrés Herrera
• 
  Paulo Díaz
• 
  González Pires
• 
  Enzo Díaz
• 
  Rodrigo Villagra
• 
  Nicolás Fonseca
  57'
• 
  Rodrigo Aliendro
• 
  Ignacio Fernández
  62'
• 
  Ezequiel Barco
• 
  Manuel Lanzini
  62'
• 
  Claudio Echeverri
• 
  Franco Mastantuono
  46'
• 
  Pablo Solari
• 
  Facundo Colidio
  77'
• 
  Miguel Borja
• Entrenador
• Martín Demichelis

• Estadio Defensores del Chaco
• Árbitro: Raphael Claus
• Amonestados:

  Merlini (L); Aliendro, Fonseca (RP).

• Goles:

  34′ Pablo Solari, 80′ Franco Mastantuono (RP); 40′ Matías Espinoza (L).

Montevideo, Uruguay | AFP

En un partido que comenzó como para arrollar y terminó con el corazón en la boca, el uruguayo Nacional derrotó 2-1 este miércoles en Montevideo al venezolano Deportivo Táchira y alcanzó la punta del Grupo H de la Copa Libertadores 2024.

Este resultado no le conviene a los paraguayo Libertad ni Olimpia. Al Gumarelo, porque lo supera en el Grupo H de la Copa Libertadores y al Decano, porque se le acerca cada vez más en la tabla hacia el Mundial de Clubes 2025.

Los goles fueron marcados todos en el primer tiempo, entre los 14 y los 30 minutos.

Con este resultado Nacional llega provisionalmente a la primera posición en su serie, con seis puntos, los mismos que los argentinos de River Plate, que más tarde en la noche visitaban en Paraguay a Libertad, tercero con tres. Táchira sigue sin sumar.

- Parecía arrollador, pero... -

Luego de un comienzo relativamente parejo, con los venezolanos esperando en su campo para contraatacar con velocidad, poco tardó Nacional en ponerse en ventaja.

Lo hizo a los 14 por intermedio del argentino Alexis Castro, que tomó en el área chica una pelota peinada por el volante paraguayo Antonio Galeano tras córner desde la izquierda.

Nacional tenía espacios y los aprovechaba haciendo circular la pelota.

Así cayó el segundo a los 21: triangulación entre Gonzalo Carneiro, Mauricio Pereira y Galeano; disparo del paraguayo, el arquero Jesús Camargo tapa pero da rebote y Jeremía Recoba remata con el arco a su disposición.

Con su gol, el juvenil ratificaba que es mucho más que el hijo del DT y antiguo ídolo de Nacional Álvaro Recoba.

Cuando los locales dominaban por completo las acciones y daban la sensación de que se encaminaban a una goleada, su defensa se durmió en un córner y el uruguayo Haibrany Ruiz Díaz descontó de cabeza a los 30 para la visita.

Estimulado, el aurinegro se animó y Nacional acusó el golpe. El primer tiempo acabó con los tricolores superados futbolística y anímicamente.

- Gusto a muy poco -

A influjo del público y de un entonado Antonio Galeano, Nacional procuró al inicio del segundo período retomar su perdido protagonismo.

Un disparo desde fuera del área del paraguayo se fue apenas desviado, a los 50.

La defensa visitante lograba sin embargo contener a un Nacional que atacaba con muchos hombres pero con escasa prolijidad y eficacia.

El partido era intenso y tenía una gran cuota de (inesperada) incertidumbre.

Curiosamente, ninguno de los DT procedía a sustituciones de jugadores.

Los primeros cambios fueron a los 68, en filas visitantes, y casi dan resultado cuando dos minutos después el recién ingresado Franco Castillo escapó en velocidad y su disparo encontró bien parado al arquero panameño de Nacional Luis Mejía.

A los 84, el tricolor Felipe Cairus puso con habilidad el cuerpo para bloquear un potente disparo desde la izquierda y salvar lo que parecía el empate de los venezolanos.

Sobre el final, el goleador de Nacional, Ruben Bentacourt, se lo perdió de manera increíble en dos oportunidades, solo frente a Camargo.

El partido culminó con Táchira al ataque y el local a la desesperada.

Nacional debía ganar y ganó. Solo eso. Los aurinegros se marcharon de Montevideo sin nada pero con la frente bien alta.

Manolo Jiménez habló sobre los múltiples puntos que hacen al partido de mañana entre Cerro Porteño y Fluminense.

El director técnico azulgrana atendió a los medios en la previa del trascendental lance, donde el Ciclón intentará hacer valer la localía. 

“Mucha igualdad, yo creo que en el fútbol actual no hay grandes diferencias entre equipos de renombre y otros que no tienen tanto nombre, está probado probado en competiciones de todo el mundo, cada vez se acorta más la igualdad entre los equipos”, arrancó.

Manolo afirmó que Cerro Porteño juega “un partido grande” contra “un grandísimo equipo” que “no por otra es el vigente campeón de Libertadores”. 

“Está claro que tendremos que estar muy concentrados si queremos sacar el partido hacia adelante”, zanjó por ese lado. 

Y es de vital importancia. Para Manolo, el juego “tendrá el valor de presunto, como todos”, pero con el valor agregado de que “una victoria ante un equipo de tanta identidad, llenaría la mochila de la ilusión, de todos”. 

“Lo importante es que seamos capaces de defender el honor de Cerro, del fútbol paraguayo y de los futbolistas. Puede marcar mucho en el aspecto deportivo. Lo negativo sería no competir y respetar tanto al rival, que ellos se sientan fuertes. El equipo debe darlo todo”, zanjó por ese lado. 

El estratega español aclaró que no conoce la fórmula “para jugar a empatar”, por lo que Cerro Porteño saldrá a ganar y a jugar un fútbol que permita anular las virtudes de los cariocas. 

“El grupo está igualado. Fluminense partía como favorito y se dejó sorprender contra Alianza. Debemos ser cautos e intentar ganarlo. La idea es hacernos fuertes, tener jugadores que no permitan a Fluminense hacer su juego. Una mezcla de saber contener y saber crear. Eso va ligado a  lo que haga Fluminense con el balón”, explicó. 

Manolo no reveló sus planes y adelantó que los primeros en saber la formación titular serán los futbolistas.